Propiedades: diurética
(ayuda a bajar el ácido úrico), frena el ansia de comer (tomando el agua de
haber macerado dos cucharadas de avena en un vaso), expectorante y mucolítica
(decocción de 4 cucharadas de avena en un litro de agua y hervir hasta reducir
a la mitad, beber un par de vasos al día repartidos en varias tomas). Favorece
la fertilidad masculina. También es afrodisíaca por su poder energético. En su
uso favorece la psoriasis, sarna, urticaria, dermatitis, en mascarillas,
dolores de reúma. En las quemaduras se puede aplicar un cataplasma hecho de
harina de avena. Ayuda a reducir el colesterol y a prevenir enfermedades como
el cáncer, la calvicie, la osteoporosis
Buenas combinaciones:
acompañada de leche de soja se convierte en un buen aporte de proteínas para
personas que no consumen alimentos de origen animal. Es famosa y altamente
recomendable en el desayuno, el muesli, una mezcla de cereales y frutos secos
que creó un médio suizo con el objetivo de obtener un completo desayuno.
Incompatibilidades: No
es recomendable tomar avena con otros hidratos de carbono, especialmente
dotados de fécula (patatas, boniatos, castañas, etc), porque pueden producir
fermentación en el aparato digestivo. La fibra de este cereal, por sí solo, es
beneficioso por cuanto reduce niveles de colesterol y facilita la digestión.
Sin embargo, puede afectar a pacientes que están tomando un tratamiento con
medicamentos ya que puede impedir la absorción del mismo, por lo que se
recomienda consultar a un especialista. No es recomendable tomar avena en caso
de estar tomando medicamentos que contengan digoxina, una droga utilizada para
casos de insuficiencias cardíacas.
Contraindicaciones y
efectos secundarios: La avena es un cereal que, aunque dispone de un
contenido muy bajo de gluten, no puede ser ingerido por celíacos.
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